Aunque gran parte de los medios de comunicación le presentaran como un mediador, es bien sabido que Washington, más que un intermediario entre el gobierno israelí y las autoridades palestinas, es el pilar que sostiene económicamente y moralmente a Israel. No hace falta leer el discurso de ayer entre líneas para darse cuenta de ello, él mismo lo volvió a dejar claro en esta ocasión, frente a universitarios y académicos mayoritariamente israelís, en Jerusalén. Sus palabras amistosas y el reiterado respaldo hacia el gobierno israelí se manifestaron con frases como esta:
"No hay muro lo suficientemente grande, no Cúpula de Hierro lo suficientemente fuerte, para detener a cada enemigo que quiere infligiros daño” (El País)

Un joven palestino interrumpió el discurso de Obama para gritarle desde el palco lo siguiente:
"Debería ser un país para todos los ciudadanos no sólo para judíos. Has venido para establecer la paz o para dar más armas a Israel para que mate al pueblo palestino? Has visto el muro del apartheid en tu camino? Quién mató a Rachel Corrie?"
La mujer a la que hizo referencia era una norteamericana pacifista que murió aplastada por una excavadora israelí. El joven fue inmediatamente detenido por la policía. Las preguntas del joven Rabbee y las de otros muchos palestinos merecían ser respondidas por el presidente estadounidense durante su visita. El discurso de Obama vuelve a subrayar el infatigable apoyo norteamericano al gobierno israelí y deja el conflicto en el aire.
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